La historia de Latinoamérica en la F1 - Parte 3: Emerson Fittipaldi
Emerson Fittipaldi es uno de los pilotos más icónicos de la historia de Brasil. Es el primer piloto carioca en ganar el campeonato del mundo de Fórmula 1, compitió exitosamente en la serie CART y ganó dos veces las 500 millas de Indianápolis.
Su nombre está a la par de leyendas brasileñas como Nelson Piquet y Ayrton Senna, y es considerado como uno de los mejores pilotos de la historia.
Emerson Fittipaldi nació el 12 de diciembre de 1946 en San Pablo, Brasil. Él y su hermano Wilson estaban inmersos en el mundo de las carreras desde muy temprana edad, siendo hijos de un respetado periodista de automovilismo en Brasil.
Cuando tenía 14 años, Fittipaldi se convirtió en el mecánico de su hermano mayor en el campeonato nacional de karts. Tres años más tarde, siguió los pasos de Wilson y se convirtió en el campeón nacional brasileño de karting con apenas 18 años.
Al año siguiente, el dúo ganó otro campeonato y pasó a las carreras de monoplazas. Ambos financiaron sus carreras construyendo accesorios para autos y karts personalizados.
Más tarde, construyeron su propio auto de Fórmula B, que le permitió a Fittipaldi ingresar al campeonato de Brasil en 1967. Tuvo grandes performances en las carreras locales y pronto, su éxito le permitió mudarse a Europa.
Siguió trabajando como mecánico para financiar sus emprendimientos y en 1969, dejó el campeonato de Fórmula Ford como líder de la temporada para ingresar a la Fórmula 3. El resultado fue increíble: pese a iniciarse con el campeonato ya empezado, se las arregló para coronarse campeón.
Gracias a su éxito, llamó la atención de varios equipos. En 1970, Colin Chapman finalmente lo inscribió en la Fórmula 2 con el equipo Lotus. Después de impresionar al británico una y otra vez, se ganó un contrato a largo plazo que le dio acceso a la Fórmula 1.
Debutó a mediados de la temporada de 1970 y logró terminar su primera carrera en el octavo lugar, después de comenzar en la vigésimo primera posición.
Sus primeros puntos llegaron en su segunda carrera, donde finalizó en el cuarto lugar.
Pero todo cambió cuando durante una sesión de práctica en el Gran Premio de Italia, ocurrió una tragedia: el líder del campeonato y piloto de Lotus, Jochen Rindt, falleció.
Después del accidente, el segundo piloto, John Miles, también se alejó de la Fórmula 1. De esta manera, el equipo no tuvo más remedio que convertir a Fittipaldi en el líder y su respuesta fue contundente: consiguió su primera victoria en el Gran Premio de Estados Unidos.
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Después de su increíble debut, en 1971 tuvo una temporada difícil donde sólo obtuvo tres podios en todo el año. Afortunadamente, en 1972 cambió su suerte y consiguió seis podios en las primeras seis carreras de la temporada, incluidas tres victorias.
Esto hizo que se pusiera en control del campeonato de pilotos.
Más tarde, victorias consecutivas en Italia y Austria, lo convirtieron en el campeón mundial más joven con tan sólo 25 años y 273 días.
Fittipaldi continuó mostrando su talento al año siguiente: el brasileño ganó tres de las primeras cuatro carreras y logró seis podios consecutivos. La temporada se convirtió en una lucha entre él y Jackie Stewart.
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Después de la mitad de temporada, tres retiros hicieron que se alejara del piloto escocés y en Monza, Peterson ganó la carrera por menos de un segundo ante Fittipaldi.
Este resultado, le dio a Stewart el campeonato de ese año y provocó que Emerson se fuera a McLaren en la temporada siguiente.
Este fue un movimiento muy inteligente de su parte. El auto del equipo británico fue competitivo y demostró ser fiable en una temporada muy cerrada que contó con siete ganadores. Con sólo cinco carreras por delante, Niki Lauda estaba a la cabeza del campeonato pero no pudo terminar en ninguna de las carreras que faltaban.
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Con sólo tres por disputar, Fittipaldi estaba en la cuarta posición en la clasificación y a sólo nueve puntos detrás de Clay Regazzoni, el líder del campeonato en ese momento.
El brasileño quedó en el segundo puesto en Italia y logró una victoria en Canadá. Esto hizo que ambos pilotos llegaran a la carrera final de la temporada en Watkins Glen empatados con 52 puntos, donde finalmente Fittipaldi superó a Regazzoni y se colocó en el cuarto lugar para conseguir su segundo título.
1975 fue otra temporada competitiva en la que el brasileño terminó en el segundo lugar en el campeonato, detrás de Niki Lauda.
En 1976, Emerson Fittipaldi se fue al equipo que creó junto a su hermano, llamado Copersucar Fittipaldi debido al patrocinio de la compañía azucarera. Por desgracia, el equipo no fue competitivo y durante cinco temporadas, Emerson logró quedar en el podio en apenas dos ocasiones.
El último lo consiguió en el Gran Premio de Long Beach de 1980, el cual puede ser considerado como un paso de mando entre dos ídolos del automovilismo brasileño...
En esa carrera, Nelson Piquet consiguió su primera victoria.
Tras esta temporada, Fittipaldi decidió retirarse de la Fórmula 1 pero el encanto de las carreras le resultó difícil de resistir.
Recibió una invitación para pilotar en la serie CART en Long Beach, regresó a tiempo completo a las carreras y ganó el campeonato de 1989. Además, consiguió coronarse en las 500 millas de Indianápolis, carrera que ganó por segunda vez en el año 1993.
En 1996, luego de un fuerte accidente en Michigan, Fittipaldi decidió que era hora de decir adiós a las carreras. Sin embargo, compitió por última vez en las 6 horas de San Pablo de 2014.
“Emmo” es considerado por muchos como uno de los mejores pilotos de la historia, siendo que muy pocos pueden presumir el hecho de haber sido campeón en la Fórmula 1, en la CART y haber ganado dos veces las 500 millas de Indianápolis.
Actualmente, el apellido Fittipaldi aún se mantiene en las competencias: Enzo, su nieto, corre en la Fórmula 2 y su hermano, Pietro, compite en la IndyCar y es piloto de pruebas del equipo Haas en la Fórmula 1. Por su parte, su hijo de 14 años, Emerson Fittipaldi Junior, se inició este año en la Fórmula 4 danesa.
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Autora: Florencia Andersen